Grundfos, fabricante mundial en tecnología del agua, celebra su 75 aniversario con firme compromiso a través de generaciones con valores sólidos, creando un mejor futuro juntos e impactando al ser pioneros.
Desde la primera bomba en 1945 hasta las soluciones digitales actuales, Grundfos ha sido sinónimo de espíritu pionero, conciencia social y soluciones innovadoras. El 75 aniversario está dedicado a los valores compartidos de los 19,280 colegas de la compañía en todo el mundo.
“Celebramos el espíritu pionero y socialmente responsable que ha impulsado a Grundfos desde el principio y continúa impulsándonos hoy. Llevamos esa mentalidad hacia adelante con un profundo compromiso para combatir los inminentes desafíos climáticos y del agua que nos afectan a todos «, dijo Mads Nipper, presidente y director ejecutivo del grupo, Grundfos.
La fecha oficial de aniversario fue el 12 de mayo, donde los empleados celebrarón en sus equipos locales. Esto tuvo lugar digitalmente para muchos empleados que trabajan desde casa debido a la pandemia de coronavirus. Es una ocasión para reflexionar sobre el pasado, el presente y el futuro.
«Estoy orgulloso de decir que Grundfos ahora es más fuerte que nunca», agregó Nipper. “En base a nuestra fantástica herencia, tenemos la ambición en la próxima década de contribuir a llevar agua potable administrada de manera segura a 300 millones de personas y convertirnos en una empresa climáticamente positiva. Gracias a nuestro talentoso y diverso equipo global, continuamos avanzando con un ojo constante en soluciones pioneras que dan forma a toda nuestra industria y más allá «.
La historia de la compañía de bombas comenzó al final de la Segunda Guerra Mundial, cuando un agricultor local le preguntó al fundador e ingeniero de Grundfos, Poul Due Jensen, si podía adquirir una bomba. Después de la guerra, había una escasez de casi todo, por lo que tuvo que desarrollar y construir un suministro de agua de calidad completa desde cero. La solución resultó ser un gran éxito y, como lo demuestra la historia, es la base de la organización que conocemos hoy.
Además de ser un espíritu innovador, Poul Due Jensen era muy consciente de la colaboración e hizo de Grundfos un lugar de trabajo inclusivo, afirmando que todos tienen el poder de contribuir.
«Si se está solo, se puede hacer un poco, pero se puede hacer mucho cuando todos trabajan juntos para hacer el trabajo», dijo, acreditando a los empleados como un elemento clave para los resultados creados.
