Por: Carlos Garcia
Con información e imágenes de: Trane México
Hay quienes afirman que nos enamoramos a través del olfato, pues gracias a él se intensifica el disfrute de las maravillas del mundo, brinda la posibilidad de revivir sensaciones, momentos e, incluso personas; sin embargo, también es importante como instinto de supervivencia, puesto que alerta sobre ciertos peligros como alimentos dañados, fugas de gas o de algún otro compuesto tóxico que podría atentar contra la salud y poner en riesgo nuestra vida o la de alguien más.
Es por ello que el olfato funge como pieza clave en la motivación de las decisiones de las personas, pues siempre querrán estar en lugares cuyo aroma sea agradable. En este sentido, cuidar y mantener la calidad de aire interior en espacios cerrados, es fundamental para garantizar la comodidad y bienestar de los visitantes, sobre todo en lugares muy concurridos y con diversas actividades en donde se aumenta la posibilidad de que se mezclen olores. Por ejemplo, en restaurantes, cuyo sector tiene gran relevancia para la economía nacional, ya que representa el 2% del Producto Interno Bruto Nacional (PIB) y el 15.3% del PIB Turístico1.
Bajo este marco, con motivo de las festividades decembrinas y ante el Semáforo de Riesgo Epidémico en verde2, las agendas se llenarán de reuniones, aumentando la demanda de reservaciones en restaurantes, los cuales deberán tener control ambiental en interiores para procurar la higiene y seguridad de los comensales.
En este contexto, existen varios elementos que perjudican la calidad del aire en espacios interiores y que son inevitables, sobre todo los olores ambientales externos provocados por contenedores de basura, el tránsito de los automóviles, granjas e, incluso, sitios de construcción. Sin embargo, es fundamental moderarlos, y esto es posible mediante el uso de equipos de aire acondicionado en restaurantes que ayudan a limpiar toxinas y disminuir olores desagradables.
Por esta razón, a los restaurantes que no administran correctamente las presurizaciones de su sistema de ventilación de aire acondicionado (también conocido como HVAC -Calefacción, Ventilación y Aire Acondicionado-, por sus siglas en inglés), podría significarles una pérdida de negocio si alguno de los olores ambientales externos se filtra al interior y provoca molestia a sus clientes.
De ser así, el primer paso para mitigar el efecto es identificar la fuente que ocasiona el problema, el cual puede originarse porque la ventilación instalada está demasiado cerca de la entrada de aire o el edificio está bajo presión negativa y extrae aire no administrado de puertas y ventanas, por mencionar algunos casos en los que se necesitará atender y mejorar la calidad del sistema de extracción y ventilación de aire que se usa.
Una vez que se identifica la fuente de los olores externos, es mejor hablar con un técnico experimentado y con licencia para determinar la mejor solución y, lo que es más importante, asegurarse de que las presiones del edificio estén equilibradas correctamente.
El fabricante Trane, recomienda algunas tecnologías de limpieza, recientemente probadas, que se pueden utilizar para tratar los olores:
Peróxido de hidrógeno seco. De utilidad para reducir los niveles de microbios en cualquier tipo de instalación, desde el aire y en superficies, sin que nadie tenga que salir de la habitación. Esta tecnología combate diferentes virus, bacterias, moho, olores e insectos.
Sistema catalítico de limpieza de aire. Mediante filtración, luz ultravioleta que mata los gérmenes y un proceso de oxidación fotocatalítica (PCO), se puede neutrailizar y reducir los contaminantes orgánicos del aire.
Ionización bipolar. Para garantizar la eficacia de tecnologías de limpieza de aire y superficies.
Estos sistemas de extracción y ventilación en restaurantes ayudan a limpiar el aire interior tanto de virus y bacterias como de olores que podrían incomodar a todas las personas que ocupan el inmueble, y los cuales podrían significar pérdidas económicas muy significativas para el negocio.
“Existen situaciones, por ejemplo, en las que los olores de gases del alcantarillado son un problema para el restaurante. Cada establecimiento puede tener situaciones únicas, lo importante es que existe una variedad de soluciones para mitigar casi cualquier problema con los olores», menciona Carlos Garcia, director general de Trane México. Y añade: “El reto está en encontrar el problema y buscar la solución adecuada”.
También es importante cuidar la migración y mezcla de olores interiores entre las habitaciones del recinto, para procurar que los comensales, al retirarse, no terminen oliendo a toda la comida preparada en la cocina, como consecuencia de una ineficiente presión de aire. Por ello, ajustar el aire exterior, equilibrar la presión y garantizar que se aplique el sistema de extracción y ventilación de aire adecuado, será clave para resolver todos los problemas de olores.
Es bastante usual que las personas permitan que los olores de los alimentos influyan en sus decisiones, y que los malos olores las alejen del lugar o, incluso, puedan cuestionarse sobre la higiene del restaurante; en consecuencia, se recomienda atender estos problemas y evitar que sean un obstáculo para el crecimiento y desarrollo del establecimiento.
1.-Secretaría de Turismo. https://www.gob.mx/sectur/prensa/el-sector-restaurantero-representa-el-15-3-por-ciento-del-pib-turistico-en-mexico
2.- AMR. https://www.amr.org.mx/noticias.phtml?id=4361&categoria=NOTICIAS