La calidad del aire al interior de los edificios se volvió un tema prioritario en respuesta a la pandemia; sin embargo, el beneficio de contar con un programa de monitoreo de calidad del aire, hoy en día puede ser clave no solo para reducir el índice de contagios, sino también para impactar positivamente en la salud y bienestar de colaboradores, inquilinos o clientes, lo cual se reflejará en los resultados del negocio.
¿Qué factores contribuyen a mejorar la calidad del aire?
Los expertos en evaluación de la calidad del aire interior recomiendan que los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado central para edificios se enfoquen en cuatro pilares clave:
- Diluir: La ventilación adecuada garantiza que entre aire fresco al interior del edificio para diluir la acumulación de contaminantes en el interior.
- Extraer: Sacar el aire de escape es igual de importante, especialmente en cocinas, baños y sistemas de combustión.
- Contener: Mantener los niveles de humedad interior dentro del rango recomendado por la ASHRAE maximiza la comodidad de los ocupantes y reduce el riesgo de crecimiento microbiano.
- Limpiar: Ayuda a reducir partículas, olores y microorganismos como moho, bacterias y virus.
El monitoreo de calidad del aire a través de estos factores ayudará a que los espacios cerrados brinden un espacio más saludable para sus ocupantes.
A continuación presentamos tres importantes razones por las que se debe prestar atención a la Calidad del Aire Interior en edificios.
El aire del exterior probablemente ya no es la solución
En el pasado se consideraba que incrementar la ventilación para permitir la entrada de aire del exterior era la mejor solución; sin embargo, según datos de la OMS, casi toda la población mundial (99%)1 respira un aire fuera de los límites de calidad recomendados, lo cual pone en peligro la salud de todos.
Incendios, esmog y contaminantes derivados de sectores industriales, del transporte y los desarrollos habitacionales promueven que el aire del exterior no sea la solución más saludable o eficiente.
Además, el cambio climático y el incremento del calor y la humedad durante el verano o los inviernos cada vez más fríos y secos, promueven un mayor uso de energía para el tratamiento del aire que ingresa a los edificios, lo cual genera un mayor gasto de recursos que vuelve necesario el uso de soluciones de aire acondicionado más eficientes y amigables con el medio ambiente.
La calidad del aire interior también impacta la productividad
La calidad del aire interior en edificios puede afectar cómo se sienten los colaboradores, inquilinos o clientes, así como su desempeño en el día a día. Estudios de la Universidad de Harvard demuestran que, incluso, puede impactar en su productividad, tiempos de respuesta y capacidad para concentrarse2.
Uno de los beneficios del monitoreo de calidad del aire es que permitirá que las personas se preocupen solo por sus actividades y no por la contaminación al interior del edificio.
Promueva el bienestar en días de frío o calor
Ya sea en días de intensa lluvia, calor sofocante o bajas temperaturas, ofrecer un ambiente satisfactorio para las personas que ingresan a su inmueble hará que se sientan más felices y concentrados.
El confort térmico es la sensación que expresa la satisfacción de los usuarios de los edificios con el ambiente y existen estudios que confirman que una pequeña desviación puede ser estresante y afectar el rendimiento y la seguridad de la gente.
Con información e imágenes de: Trane
1 Miles de millones de personas siguen respirando aire insalubre: nuevos datos de la OMS.
2 Office air quality may affect employees’ cognition, productivity.