QUÉ ES LA TECNOLOGÍA INVERTER Y POR QUÉ RESULTA ESENCIAL PARA GASTAR MENOS ELECTRICIDAD

Cualquiera que se haya interesado en comprar o instalar un aire acondicionado en los últimos tiempos, seguramente se habrá encontrado con la misma recomendación: “si puedes, compra Inverter”.

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La razón, según técnicos y vendedores, es que esta nueva evolución de aires acondicionados permite ahorrar hasta un 35% de energía y se trata de una alternativa más moderna. ¿Pero cuál es la diferencia entre un aire Inverter y uno normal?

La tecnología Inverter permite regular la velocidad del compresor. “De esta manera, se logra la potencia necesaria para llegar a la temperatura deseada sin la necesidad de consumo extra”, señaló Mariano Bruno, Gerente de Ventas para el Cono Sur de York, la marca de la multinacional Johnson Control.

A su vez, esta tecnología da la posibilidad de regular la velocidad del compresor sin la necesidad de realizar arranques y paradas innecesarios como si lo hacen los equipos tradicionales. “Es decir, cuanto mejor es el componente electrónico, mejor regula la velocidad del compresor. De ese modo, responde de manera más rápida a los cambios de temperatura solicitados”, explicó Bruno.

Por otro lado, cuanto mejor sea la electrónica Inverter (o sea, el componente utilizado) esta adaptabilidad de la velocidad del compresor se hará de manera más eficiente, lo que posibilitará un mayor ahorro energético.

“Cuanto mejor es el compresor, mejor capacidad de reacción tiene, y por lo tanto es capaz de alterar su velocidad a diferenciales cada vez menores para que el usuario no perciba modificaciones en la temperatura”, señaló Mariano Bruno.

Ahorrar energía, en temporada alta
Frente a un panorama complejo, como es la quita de subsidios y la llegada de temporada alta en el uso de aires acondicionados, que elevará sustancialmente los montos de las facturas eléctricas, la utilización de la tecnología Inverter resulta esencial, debido a que permite, como se mencionó, gastar hasta un 35% menos de electricidad.

Dicha diferencia se debe a que, al moderar la velocidad del compresor, se requiere de un menor uso de energía. A su vez, impide que los artefactos se apaguen y enciendan con cada cambio de temperatura, evitando así el pico de consumo, lo que genera un ahorro energético.

Más estabilidad
Por fuera de la cuestión económica, hay otra, más relacionada con el confort, que también es consecuencia de la nueva tecnología. Se trata de la estabilidad de la temperatura. Al controlar electrónicamente la velocidad del compresor, se corrigen antes las variaciones de temperatura en los espacios.

Los aires acondicionados de esta nueva generación tienen una sola contra, y es que son un poco más costosos que los de compresor fijo.

Sin embargo, dicha diferencia se equilibra tanto por el ahorro de energía como por la duración de los equipos, ya que tienen un menor desgaste. “Al evitar arranques y encendidos, así como hacer girar el compresor a velocidades bajas, conserva mejor el equipo de aire acondicionado”, detalló Mariano Bruno.